San Valentín, formas de sorprender a tu pareja en la cama el día de los enamorados

Muchos son los que están totalmente en contra del día de San Valentín por considerarlo una fiesta puramente capitalista, sin embargo eso no quiere decir que no sea un día muy interesante para tener algún que otro detalle romántico con tu pareja, tener un detalle como llevarle el desayuno a la cama, dedicarle un poema o desempolvar ese conjunto sexy que un día te compraste pero que no habías utilizado hasta ahora.

Es por ello que, lejos de tener comprarle un regalo para demostrar tu amor, lo que debes hacer es aprovechar ese día para sorprenderle en la cama, ya sea llevando a cabo esa fantasía sexual por la que se muere desde hace mucho tiempo, practicando sexo en esa postura que nunca te ha inspirado tanta confianza pero que él te suplica desde hace mucho tiempo o incluso llegando un paso más y proponiéndole un trío que satisfará sus fantasías más ocultas.

San Valentín es la fecha ideal para hacer el amor

Sea como fuera, lo que está claro es que San Valentín es una ocasión muy buena para hacer el amor con tu pareja y probar cosas nuevas. Por ello, es importante tenerlo todo bajo control, planéalo a escondidas durante días o incluso semanas y no dejes que nada ni nadie eche tu plan a perder.

Tenlo todo presente a la hora de planificar la velada, desde el lugar en el que vayáis a comer (no tiene que ser fuera de casa necesariamente), pasando por la película que vayáis a ver (si os apetece, claro), hasta la ropa que vas a llevar puesta. Hay quien cree que es mejor ser espontáneo, sin embargo, la experiencia me dice que lo mejor es tenerlo todo planificado y no dejar que las cosas puedan salir mal.

Déjale caer “migas de pan” de cuáles son tus intenciones para ese día y que desde el principio tu pareja sepa que ese día vais a tener sexo del bueno, pero que debe tener paciencia si desea recibir el premio final.

Crea un ambiente romántico

Para ello lo más importante es crear un ambiente propicio. Para ello, es fundamental tener en cuenta aspectos tales como la iluminación de la habitación, la utilización o no de velas, de luz natural o de luz artificial y hasta la decoración de la misma mesa.

Sorpréndele poniendo las canciones que más representen vuestra relación, como la música que sonó durante el baile del banquete de la boda o la primera canción que escucharon al deciros “te quiero”.

No tengas miedo a parecer cursi o sensiblera, en esos días todo esta permitido a nivel de cursilería, por lo que tener buenas palabras hacia tu pareja es un buen método para que fluya la magia y el ambiente sea el adecuado.

Hazlo con delicadeza

Desaconsejamos en todo momento ser excesivamente explícito. Si lo que deseas es un “polvo rápido” entonces bastará que te pasees desnuda delante de él y recordarle qué día es hoy. Pero no, eso puede que no funcione, o al menos, no cómo tu deseas.

En estas ocasiones especiales, es mejor ir poco a poco y los preliminares cobran más sentido que nunca. Un sensual masaje, un paseo, pasar tiempo juntos haciendo una cosa u otra, todo ello dará consigo que la velada acabe siendo un éxito absoluto, así que lo mejor es ir paso a paso con tranquilidad.

Sorpréndele con ropa interior sexy

No obstante, eso no quiere decir que, debajo de la ropa que llevas puedas ponerte un conjunto de lencería especial, un sujetador con push up que levante un poco más tus pechos y le hagan crecer un par de tallas, al menos visualmente, algo que tu pareja sin duda agradecerá.

En este punto, es importante conocer los gustos de tu media naranja. De nada servirá recomendar los tonos rojos y negros (ideales para la lencería), si a tu pareja lo que realmente le pone son los tonos azules y verdes.

Tampoco debe ser por fuerza un conjunto de lencería, a veces basta con un camisón ajustado que poder vestir sin sujetador y, estratégicamente pueda mostrar mucho más de lo normal cuando te agaches a recoger algo. ¡Provócale! Seguro que a él le encantará.

Esfuérzate en hacer que goce al máximo

Una vez estéis teniendo relaciones sexuales, trata de que goce al máximo durante el sexo. Existen muchos días al año en el que las relaciones deben ser cosa de dos y ambos deben de sentir placer en todo momento para que todo funcione, sin embargo, San Valentín es un día distinto, es aquella fecha en la que lo que nos importa es hacer que nuestra pareja sepa lo mucho que le queremos y para ello debemos de dejarnos llevar y hacer que él disfrute todo lo posible.

Los chicos, en cambio, tendrán que devolvernos el favor después, ya sea practicándonos sexo oral, masturbándonos con un consolador o haciendo aquellas cosas que a las chicas tanto les gusta y que deberán de llevar a cabo para satisfacerlas a ellas, al fin y al cabo, para las mujeres también es el día de San Valentín.